Es frecuente que en la organización de diferentes ámbitos de una comunidad de vecinos surjan discrepancias y problemas de consenso. Por eso es recomendable la contratación de un administrador de fincas que os ayuden a gestionar adecuadamente todos los aspectos que conlleva una comunidad de propietarios.
A la hora de la limpieza de las comunidades lo más frecuente es que se contrate a una empresa de limpieza o a una persona responsable del cuidado, limpieza y mantenimiento de los espacios comunes. Aún así os dejamos algunas recomendaciones a tener en cuenta:
- Las entradas, rellanos y pasillos son zonas muy transitadas por lo que requerirán un mantenimiento continuo para que estén en perfecto estado.
- El respeto entre todos los vecinos tiene que estar por encima de todo, por ello todos deberán tratar de cuidar el ascensor para que funcione correctamente, o tener cuidado con la limpieza y espacios comunes si se realiza una reforma en el piso.
- Las mascotas no deberán estar nunca sueltos por las zonas comunes y menos hacer sus necesidades. En caso de que ocurra se deberán limpiar inmediatamente. En las zonas como los jardines o la piscina se puede prohibir su entrada para respetar a todos los vecinos.
- Los garajes son una zona de bastante suciedad, por lo que también tendrán que hacerse labores de limpieza en profundidad. Además, se tendrán que hacer labores de desinfección, desratización y usar máquinas fregadoras o productos específicos para eliminar la suciedad que dejan los coches.
- Si se determina una zona para la recogida de basuras, siempre se deberán llevar ahí para evitar malos olores e insalubridad.